¿Sabías que las formas que utilizas para el diseño de tu identidad visual influyen en lo que tu público percibe de ti. No es lo mismo que tu logotipo tenga forma circular, cuadrada o triangular, al igual que no es lo mismo que tu marca esté llena de gráficos y líneas horizontales o verticales. ¿Te interesa este tema? En este post te contamos todos los detalles para que transmitas todo aquello que deseas a través del branding y todos sus elementos.

El círculo representa perfección, innovación, protección, creatividad y movimiento. Sin embargo, el cuadrado ayuda a transmitir seguridad, fortaleza, realismo, estabilidad, masculinidad, compromiso y honestidad. Y por último, el triángulo se utiliza para representar soporte, ciencia, poder, divinidad o vitalidad.

En el caso de las líneas es similar. Las líneas curvas reflejan amistad y movimiento, mientras que las líneas verticales muestran balance.

Por el contrario, las líneas horizontales proyectan confianza y las diagonales dinamismo. 

Es muy importante y necesario que comprendas que a la hora de diseñar un branding, ningún elemento debe ser elegido al azar. Cada detalle debe seguir la estrategia fijada para tu marca y para llegar a tu cliente ideal. Por lo que, a la hora de contratar a un profesional, asegúrate de que su misión en el momento de diseñar tu identidad de marca sea que comunique un mensaje claro y dirigido a tu público objetivo, no simplemente la creación de un logo bonito.

¿Quieres llegar a comunicar y sobre todo transmitir tus valores a través de una imagen única llena de detalles? Deja que te acompañemos en una experiencia de diseño completa hasta crear la marca de tus sueños. ¡Estás a un solo click de tenerla!

Jesús Mohedano es un fotógrafo especializado en fotografía nupcial. Desde el momento en el que se puso en contacto conmigo y hablamos por primera vez, tuvimos muy clara la imagen que queríamos para su futura identidad de marca. Queríamos una marca auténtica, detallista, elegante y sofisticada, pero sin perder esa cercanía y honestidad que muestra con cada uno de sus trabajos.

Empezamos buscando mucha inspiración, y como siempre. centrándonos en su cliente ideal y en lo que queremos que sintiera al interactuar con la futura marca.

Tras muchos borradores y bocetos, dimos con el ícono que sí o sí, tenia que formar parte de su nuevo logo. Un monograma de dos “J”, que a la vez simulaba el objetivo de una cámara.

Este es solo uno de los múltiples elementos que formaron la identidad visual. Después creamos el logotipo principal, el logo secundario, más variaciones, recursos gráficos, sello, etc. También seleccionamos las tipografías de la marca y cómo sería la jerarquía tipográfica de la misma, sin olvidarnos por supuesto de la paleta de color corporativa.

Una vez tuvimos todo listo, nos pusimos manos a la obra con la papelería de la marca: tarjetas de empresa, sobres… Incluso pensamos en algún que otro diseño colateral como una tote bag.